To Be Continued…
UN CHEQUE EN BLANCO
Que porqué escribo esto? Sencillo, para no volverme loca, esta tarde la dedicaré únicamente a poner mi vida en manos de mi único cheque en blanco, en aquél que sólo sabe consolarme, el que sabe cuál es mi camino.
Esto que nos ha hecho parar, para descubrirnos a todos, a grandes y pequeños, que somos nada, que no hay límite, ni color, ni ideología ni edad, y que por todos puede pasar…
Esto es lo que me ha hecho ver que mi vida, pendiente de un hilo, el hilo de la peli de Hércules, que las brujas cortan y zas, o el que se vuelve inmortal por ser un Dios. Ese hilo que todos sabemos de qué va, pero en pocas ocasiones nos da tiempo a mirar porque tenemos que ir corriendo a la siguiente reunión. Ese activismo vacío.
Lo que yo he aprendido es que cuando quieres planear, o planificar, a veces, hay ese algo más grande, más excepcional, que hará que tus planes no salgan. En estos momentos no quedan muchas salidas, llorar o reir. Pasar impasivo, más raro que así sea.
Luego está la montaña rusa, pero qué latido no sube y baja, la línea plana, la muerte.
Yo soy cómo soy, pero hace cuanto tiempo no me atrevía a escuchar ese grito de : STOP.
Ahora desde hace ya dos años, paré, decidí que mi reloj lo marcaba yo, que mis decisiones eran mías. Circunstanciales que hemos oído decir siempre.
Como Tomas Moro, el gran humanista decía, con necesidad de ética, de amor, pero con libertad. Pero no es hoy que nos han quitado la libertad, eso que nos identifica y señala como hombres, como especie. La que nos dota de alma. Hoy nos sentimos atados. Pero ¿a qué?
Y mi reflexión es a qué quiero atarme, a qué he estado atada, y quiero soltar o apretar para que no se vaya… y dónde quiero dirigirme cuando vuelva la libertad. Mis valores me indicarán mis decisiones.
Es rápida la conversión de las industrias, que no son más que las personas, incluso antes de las contractuales, hemos visto que las empresas que su herramienta era la máquina de coser, han dejado sus productos para querer salvar a los otros… pero ahora que tengo tiempo para pensar, qué quiero coser ahora para mi vida
Hoy. Ahora. Quien quiero ser? De qué quiero alimentarme, llenarme, transformarme en aquello que quise pero nunca me atreví? No es ahora el momento.
Porque si ahora tampoco, aunque las circunstancias no te lo permitan, pero al menos piénsalo, qué es lo que quieres, como decía hace unos días mi amigo JCC, con quieres tener esa cita. Esa amiga con la que hace tiempo tenías pendiente la cerveza, pero la vida de reloj no te dejaba. La sonrisa de tus hijos, el dejar pasar el reloj, y la palabra mágica, la hemos vuelto a escuchar, ABURRIMIENTO. Y qué saludable. Y la otra, REFLEXIÓN, ORACIÓN, MEDITACIÓN, PENSAMIENTO, SILENCIO.
Esto es lo que nos hace libres, dignos, seres amados.
No sé cual serán mis pasos, sé solamente que ahora serán conscientes pausados. Como esa conversación sin reloj, que un día tuviste con esa persona especial, con un café entre las manos, en una terraza al sol, hablando de no recuerdas muy bien qué, solo la mirada es cómplice, de tu amistad y entrega, eso que cuando lo he contado alguna vez, me han dicho, charlar sin reloj, sin ver a qué hora hay que irse, y sorprendidos todos, han dicho nunca lo he hecho, cuando sé que no es cierto, conozco a maravillosas personas, matrimonios que lo practican cada sábado, eso que nos trasforma en personas, en humanos que aman.
Vivir en pausa, la espera, menuda palabra que me ha tocado aprender en esta sesión, ahora que sabía, ahora pausa, ahora el fuego lento de las abuelas, ese que se forja con amor intenso, ese que es el amor que acuna a los bebes por las madres a media noche, esa entrega de los amores en los hospitales, esa lectura de tu libro favorito, ese caminar por la playa sin saber cuando volverás a dar la vuelta, eso que nos convierte en humanos, ahora toca esperar, a que cuando estemos listos, hayamos recuperado el sentido de nuestros latidos, de mirar hacia adentro, volvamos a salir y libres, decididos, más profundos pensemos en qué pasos y a qué velocidad querré ir a la meta. Porque como en el camino de Santiago dicen, no es el destino la Catedral, sino el Buen Camino del peregrino lo que lo hace la experiencia más bonita de todas, la entrega de cada paso, de estar ente las nubes … porque Él nos quiere felices, porque el quiere que podamos vivir entre las nubes ahora también, vivir un poco en el cielo, y para eso, solo una cosa, pause.
To be continued…
MI PAUSA
Una canción que me toca siempre que sus notas rozan mi piel… Marta Soto… no te pido que vuelvas, a donde no quieras ir, pero y si quisieras volver? piensalo …
Gracias por leerme hoy, solo son mis letras de esta tarde.