Tecnología, la palabra del que todo el mundo habla…. y sus porqués
Tecnología, la palabra del que todo el mundo habla…. y sus porqués
Binomio conocido y emergente en nuestra sociedad económica. Pero, y si mencionamos las siguientes siglas: IT., BI., PMI., GTD., ERP., SAP., CRM., SCM., RR.SS., etc…, entonces no sabemos de qué estamos hablando.
Bien para ello me gustaría comenzar con una reflexión de Perter Drucker en el año 1999: “El activo más valioso de la institución del siglo XXI (sea o no de los negocios) será el trabajador del conocimiento y su productividad”
A qué me voy a referir pues en estas líneas, a marcar la importancia que tienen los programas, software y otras herramientas … para conseguir el objetivo que nos marcó Drucker: el conocimiento y la productividad. Ya que si se pierde este punto de mira, el directivo se perderá en el entramado tecnológico y no se conseguirá el objetivo deseado.
En mi opinión los que hoy asumen el más alto grado de responsabilidad en el mundo global de la economía son los directivos, que desempeñan o deberían de desempeñar la labor de gestores de proyectos, de analistas y traductores del conocimiento, es decir los que transforman la información del mercado para conseguir elevar el rendimiento económico de las empresas, con la consecución de los objetivos que les marcan.
En el siglo pasado era la mano de obra la pieza clave del puzzle, hoy sin duda es la habilidad para transformar el bigdata, la información clave de los mercados, en conocimiento, para optimizar el proceso de toma de decisiones. A lo que algunos denominan con las siglas B.I. (Bussiness Intelligence) y es que la aparición de las (TIC.) ha crecido en este siglo exponencialmente.
Lo que sin embargo nos encontramos hoy día, es que los directivos han sido devorados por las propias tecnologías (IT.) que no les permiten avanzar; en estudios recientes se asegura que los directivos solo disponen de 5 horas de trabajo real a la semana, ya que el resto del tiempo lo ocupan las apps que se suponían resolverían sus vidas.
Es por ello que métodos como el “GTD.” (Getting Things Done) se divulgan e implantan por los coach en las grandes y pequeñas empresas, método basado en liberar la mente de tareas pendientes ayudados (ahora sí) por un soporte externo que me ayude a: recopilar, procesar, organizar, revisar y hacer dichas tareas. La tradicional libreta para recordar las tareas pendiente, vaya. Y empiezo por dicha labor porque si creo que el PMI. (Director de Proyectos) aquí entendido como Directivo/Jefe, es el clic necesario para la consecución del objetivo empresarial, y si éste no funciona de nada servirán los desarrolladores internos y/o externos que se implanten en las empresas, o la apertura a los nuevos canales de ventas.
He mencionado los sistemas internos, que serían los métodos implantados en el sistema productivo (producto/servicio) de las empresas a fin de obtener una mejora en los procesos para apoyar a la toma de decisiones de forma más rápida y efectiva. Que las hacen más competitivas y rentables, en definitiva.
Entiendo como sistemas internos los llamados ERP. (Enterprise Resource Planning) en castellano Planificador de recursos empresariales, como sean SAP. (Systems, Applications, Products) e incluso la incorporación de PMI (Project Management Institute) o Director de Proyectos, en las empresas, o la aplicación del BI. de forma real y efectiva, poniendo a su alcance métodos como el GTD, y otras herramientas de gestión como Apple, líder en su mercado.
Por el contrario se podrían denominar sistemas externos a aquellos canales de gestión que tienden a relacionar la información con agentes externos de la propia empresa, como sean el SCM. (Supply Chain Management) o Cadena de Suministro, lo que no quita para que éste a su vez repercuta en la propia toma de decisiones “interna” de la empresa, pero nos dará un cuadro de mandos rápido para la toma de decisiones con dichos operadores externos, ya sean proveedores, mayoristas, minoristas, clientes, finanzas, etc. …
Aplicando tales técnicas empresariales conseguiremos los objetivos en menos tiempo y con un valor superior. Para luego salir al mercado en el nuevo canal de venta por excelencia “internet”. Que unidas a las nuevas estructuras sociales como pudiera ser la Reina: Facebook., nos llevan camino del éxito.
No deberíamos perder de vista, que estos nuevos canales, redes sociales o estructuras, no dejan de ser un conjunto de actores relacionados de acuerdo a un criterio común, tal y como sucedía ya en las tribus, ¿qué ocurre?, que ahora no todos son actores o conocen las normas que las regulan. Es por ello que surgen las nuevas profesiones, para poder operar y estar en ese gran mercado electrónico, los grandes influenciadores se dedican a posicionar a las empresas offline en el canal apropiado y a examinar los datos que surgen tras la realización de su negocio, pues ellos les ayudaran aún más a mejorar su posición en el tráfico online.
En resumidas cuentas, podemos optar por conseguir la financiación deseada para esa implantación del sistema (esas siglas malditas en ingles del que todo el mundo habla y en realidad nadie conoce) que nos ayude a mejorar nuestros procesos, pero si no contamos con el directivo apropiado para la gestión del conocimiento que dichas herramientas le proporciona, es preferible que sigamos la metodología tradicional, lápiz y papel.
Macarena Perona